La Chacha Ana tiene muchas cosas buenas, muchísimas.....pero a cansina no le gana nadie....
3 años llevaba diciendo: "ya está bien, que soy la personas que más veces ha venido a echar una mano y aquí tiene un árbol con su nombre to titirimundi, menos yo....".
Así que quisimos buscar un árbol que la representase.
Por supuesto tenía que ser un frutal - la Chacha Ana es de esas personas que alimenta y genera un producto dulce a quien la cuida y la quiere -.
Tenía que ser rústico, una persona de Mahora (la manchuela albaceteña) no puede ser representada con plantas delicadas a las que puede dejar K.O. un mal viento frío o la falta de agua....pero también tenía que ser colorido, pizpireto.... y el madroño es así.
Sus frutos rojos anaranjados, son como su pelo rojo, sus aspavientos a la hora de expresarse y su risa.
Una vez que lo vimos claro, y que lo pusimos en su conocimiento, compramos el madroño y aquí está la madrina, haciéndole la cama a su árbol.
Lo plantamos en verano, una de las veces que coincidimos en Ciudad Real, y no siendo la mejor fecha para plantar, gracias a los cuidados constantes de papa Esteban (el padre de Esther, actual encargado del Atalantar), ahí está precioso y brotando por todos lados.
Ya lo tenemos. El único Madroño de la parcela se llama Ana, y tiene que ser único porque como ella no hay dos.
Te queremos Chacha Ana. Ahora tendrás que inventar otra queja, para meterte con nosotras gratuitamente.
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