El día 18 de marzo a las
16:00 horas, tuvo lugar un encuentro de vecinos de Socuéllamos,
Mota del Cuervo y Pedro Muñoz en el paraje de la gran encina mileria Ruli.
Con este acto se ha querido visibilizar que hay gran interés en los habitantes de la zona en que El Gran Árbol no se dé por muerto.
La convocatoria quiere exigir a la Junta de Comunidades que ejerza la protección requerida con la mayor celeridad a este árbol, catalogado por la propia Junta como árbol singular. Ruli es un monumento natural de la región, que según los expertos tiene en su haber más de 1.200 años de vida y muy posiblemente es el ser vivo más longevo de toda Castilla La Mancha.
Mota del Cuervo y Pedro Muñoz en el paraje de la gran encina mileria Ruli.
Con este acto se ha querido visibilizar que hay gran interés en los habitantes de la zona en que El Gran Árbol no se dé por muerto.
La convocatoria quiere exigir a la Junta de Comunidades que ejerza la protección requerida con la mayor celeridad a este árbol, catalogado por la propia Junta como árbol singular. Ruli es un monumento natural de la región, que según los expertos tiene en su haber más de 1.200 años de vida y muy posiblemente es el ser vivo más longevo de toda Castilla La Mancha.
El pasado 6 de febrero, la
nieve rompió uno de los tres enormes brazos de la encina. Tras esta primera rotura, se dió a conocer el suceso a los medios de comunicación, al ayuntamiento de Mota del Cuervo, a la
Delegación provincial de Cuenca y al dueño de la parcela. Desde entonces ha
habido un baile de competencias y ningún cuidado más ha llegado por parte de las
autoridades al "Monumento natural" herido.
En las últimas semanas,
debido al viento y la lluvia y al estado delicado en el que quedó después de la
primera rotura, se han sucedido otras fracturas.
Desde el grupo de “Amigosde la Encina Ruli”, con el apoyo de Ecologistas en Acción, queremos exigir a la
administración competente que actúe con premura para resolver esta situación
crítica, y que este caso sirva para generar un protocolo de protección real, para el resto de encinas de la zona, posiblemente hijas de Ruli, para que este
trágico vacío de acción no vuelva a suceder nunca más.
En la jornada de ayer, los Amigos de la Encina quisieron intervenir en el árbol para garantizar su vida mientras la Junta actua, intentando con los medios de los que disponían prepararla para la espera, apuntalándo la rama viva para evitar posibles fracturas con el aire y poniendo tierra en las raíces descubiertas por el derrumbamiento de las dos ramas heridas por el viento y la nieve.
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